Hace 51 años que apareció en escena, el avance de la tecnología lo había derrotado y lo hizo un objeto de culto entre los hipsters, melómanos y otras personas que le tienen amor a la música, sin embargo, parece que vuelve, hablamos del Cassette.
Bandas de la escena independiente lo están recuperando principalmente por cuestiones económicas ya que es una forma barata de editar un material con calidad gracias a la ayuda de empresas como Duplication quienes desde 1989 comenzaron un sistema bastante interesante de grabación musical: los pequeños artistas interesados en difundir su obra llevan una grabación con las pistas musicales acompañada de otro archivo que será la portada y estas se convierten en un archivo material, para esta compañía este formato representa el 25% de sus ingresos.
Otro punto a destacar es que generalmente es un costo menor el de venta del Cassette a comparación de CDs, estos generalmente se asocian con una descarga digital para tener los archivos disponibles en su escucha en dispositivos digitales, esto genera una mayor cantidad de ingresos, los puristas del sonido defienden a este formato físico como de una calidad superior a escucharlo en un iPod.
Además el Cassette está teniendo una imágen revitalizada como símbolo de lo retro, de lo independiente que incluso ha llevado a la empresa Moleskine a lanzar libretas cuyo diseño los imita, otra razón es la estética ya que muchas veces estos son coloridos y sirven para decorar espacios, junto con los vinilos, los cuales también están regresando a la escena pero que, sin embargo, son mucho más caros.
Este motivo económico es el que no hace muy rentable que las bandas importantes regresen a utilizarlos, ya que el beneficio económico que se obtendría no sería demasiado, además es de destacar que los vinilos ofrecen una mejor calidad y ayudan a las bandas a tener un formato más conocido y soportado para difundir su música.
Por último, el cassette seguirá siendo un objeto de coleccionistas o personas influenciadas por lo vintage ya que las tendencias musicales se orientan más hacía las descargas musicales y a servicios de streaming como Spotify, a esto hay que añadirle que la mayoría de los consumidores ya no cuentan con dispositivos que les permitan reproducir estos formatos. LARGA VIDA AL CASSETTE.
